| Alambrado |
En esta página daremos una normas generales para que el aficionado que comienza a iniciarse en el arte del bonsái, pueda realizar sus primeros alambrados, sin miedo y con alguna garantía de éxito, más adelante el aficionado irá descubriendo otras fórmulas e incluso irá aplicando sus propias ideas, fruto de la experiencia que irá adquiriendo.
Antes de comenzar el alambrado, escogeremos el tamaño de alambre más adecuado a la rama que se desea alambrar, tanto en longitud como en diámetro, teniendo en cuenta que deberá ser 1/3 más largo que la longitud de la rama o el tronco a alambrar.
Debe alambrarse siempre hacia delante, o sea póngase enfrente de la rama que tiene que alambrar y hágalo hacia usted, de esta manera evitará aplastar hojas o brotes que podrían quedar aprisionados entre el alambre y la rama.
En el supuesto de que haya que alambrar un tronco, empezaremos desde la base, hasta llegar al ápice del árbol (ver figura 1).
El alambre se debe clavar en la tierra unos 4 o 5 cm. y el ángulo de alambre al enrollarse sobre el tronco del árbol deberá formar un ángulo de 45º. (ver figura 2).
Algunas consideraciones a tener en cuenta serán las siguientes:
Se debe alambra en una sola dirección (ver figura 3).
Si se quiere doblar la rama hacia abajo, primero pondremos el alambre por arriba y luego por abajo (ver figura 4).
No se debe alambrar demasiado flojo, ya que el alambre perderá su eficacia y la rama se puede romper. (ver figura 5).
Los alambres no se deben cruzar nunca (ver figura 6).
No alambre varias ramas a la vez, hay que hacerlo de una en una y por separado (ver figura 7).
Si alambramos pinos, las agujas no deben quedar aprisionadas por el alambre (ver figura 8).
En árboles de hoja caduca, cuando alambre, evite presionar sobre hojas y brotes con el alambre, ya que podrían resultar dañadas (ver figura 9).
No debe utilizarse alambre trenzado, en primer lugar por razones estéticas, y en segundo lugar porque es más difícil de modelar sobre las ramas (ver figura 10).
Evite alambrar tan junto como en la figura 11, es antiestético.
En la base de la rama no deje el alambre muy suelto, ya que así no aguantará a la rama en la posición deseada (ver figura 12).
Nunca utilice un mismo alambre para dos brotes que estén directamente opuestos, esto debe evitarse ya que los movimientos puede perjudicar a ambos brotes. Debe realizarse como se indica en la figura 13.
No alambre con el mismo alambre brotes situados como en la figura 14.
En ramas excesivamente finas no alambre hasta el final, aunque le sobre alambre la rama podría resultar dañada. (ver figura 15).
No tienen que quedar puntas de alambre sueltas, deben cortarse (ver figura 16).
En el caso de poner varios alambres juntos, estos deben permanecer así durante todo el alambrado.(ver figura 17).
Para terminar está sección dedicada al alambrado, daremos por último unas normas generales, que todos los aficionados al bonsái debemos tener en cuenta:
El alambre ni puede ni debe dejarse indefinidamente en el árbol, para evitar que se clave en la corteza y queden marcas que, en algunos caso pueden llegar a ser incluso irreparables.
Hay que vigilar por lo tanto con atención y, a la más leve señal del alambre en ramas o tronco, se debe proceder a quitar el alambre, esta operación se hace cortándolo y nuca desenrrollándolo, para que no resulten dañados los brotes.
Para cortar el alambre existen alicates especiales así como una serie de herramientas que son de gran utilidad para todo aficionado al mundo del bonsái.
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