"Diseño de un bonsái a partir de un prebonsái de Ficus retusa" por D. Pedro Morales

29/05/2001

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La demostración comenzó con una presentación realizada por Dña. Carmen Lozoya, presidenta del Club Bonsái Madrid, en la que hizo un breve resumen del Curriculum Vitae de D. Pedro Morales:

"D. Pedro Morales, natural de Chicago y afincado en Puerto Rico desde niño, se inició en el bonsái con motivo de un trabajo de investigación durante su primer año de Universidad, en 1980

Poco tiempo después se hace miembro del Club Bonsái de Puerto Rico, donde siguió diversos cursos hasta conseguir la clasificación de Juez, en 1988; y Master en 1989.

En los años 1988 y 1989 uno de sus árboles, un Mangle Botón y una Nia fueron seleccionados respectivamente para exhibirse, mediante fotografía, en la 9ª y 10ª Exposición Internacional de Bonsái y Suiseki, en Japón.

En 1990 comienza una larga serie de demostraciones y talleres en Chicago, Lima, Detroit, New York, New Jersey, Bombay, y un largo etc.

Asimismo es autor de numerosos artículos para revistas internacionales especializadas, como la World Tropical Bonsái Forum

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Pedro Morales


D. Pedro Morales ha participado en la fundación de la Federación Latinoamericana de Bonsái en Cali, Colombia; y es socio fundador y Presidente de la Federación de Bonsái de Puerto Rico. Asimismo es miembro de la Junta de Directores de Bonsái Clubes International, como Director por el área de Centro y Sur de América.

En 1997, en la Convención Mundial de Bonsái en Corea, asiste al Maestro Susuki en una demostración con pino negro. Ese mismo año viaja a Japón, viaje organizado por los Maestros John Y. Naka y Ben Oki, donde conoce a los Maestros Masahiko Kimura y Saburo Kato.

Foto nº 2
Preparado para trabajar

En 1998 la Federación de Bonsái de Puerto Rico y Bonsái Clubes International crean el premio "Pedro J. Morales" Designa Award, en reconocimiento a su labor en Latinoamérica.

Aunque Don Pedro Morales se declara especialista en plantas tropicales, también domina el bonsái de cualquier especie."

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El arbol antes del trabajo

Teniendo en cuenta que la demostración se realiza en Madrid y a finales de Mayo, el Club Bonsái Madrid pone a disposición del demostrador algunos pre-bonsáis de Ficus Retusa (una de las pocas especies que aún se puede trabajar en estas fechas). Don Pedro elige uno de ellos y se congratula de que hayamos elegido un Ficus por dos motivos: En primer lugar porque conoce muy bien esta especie y, en segundo lugar, porque es un árbol muy resistente. Nos comenta que "un Ficus es bien difícil de matar. Si alguien logra matarlo es mejor que abandone la práctica de bonsái"
Para empezar el Sr. Morales nos dice que lo que vamos a trabajar debe ser calificado como un pre-bonsái, aunque en algunos establecimientos comerciales se vendería ya como bonsái. En términos coloquiales califica al árbol como "una mata en un tiesto", y afirma que su labor en la demostración consistirá en conseguir darle un aspecto de árbol adulto.
También nos dijo que aún es buena época para defoliar, así que lo mejor sería defoliarlo para que las hojas no impidan ver el trono. ¡Dicho y hecho!. Diez minutos después al árbol no le quedaba ni una sola hoja, de forma que se podía apreciar perfectamente el movimiento de su tronco, la enorme cantidad de raíces aéreas, las ramas principales, ….. El proceso de defoliación se realizó cortando las hojas pero respetando el peciolo.

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El nuevo frente

A continuación Don Pedro Morales comentó que el chino que había trabajado el pre-bonsái había elegido un frente que, en su opinión, podría ser mejorado. Analizamos dos posibilidades y, finalmente, se optó por un nuevo frente e inclinación de plantado, que permitía visualizar un buen movimiento del tronco y ocultaba una pequeña desproporción en el crecimiento del tronco.
La nueva inclinación de palntado tenía como principal misión bajar la primera rama a una altura apróximada de un 1/3 de lo que iba a ser la nueva altura del árbol.
La elección del nuevo frente tuvo como consecuencia la necesidad de eliminar dos ramas mayores, lo cual se realizó de inmediato para ganar visibilidad y el Sr, Morales comentó que en el Ficus no es necesario utilizar pasta selladora, ya que la savia del árbol servirá para cicatrizar la herida. En todo caso se puede utilizar la propia tierra de la maceta como "maquillaje" de froma qeu, al extenderla con la mano sobre las heridas se elimine su llamativo color blanquecino.

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Defoliando como chinos

Don Vicente nos dice que en una de las ramas se aprecia un crecimiento invertido, es decir, a partir de un cierto punto de la rama el grosor aumenta, en vez de disminuir. Esta circunstancia es debida a que, poco antes del lugar donde se presenta el crecimiento invertido hay una raíz aérea, que el la causante de este hecho. Aunque según la teoría clásica del bonsái este efecto es indeseable, en su opinión en esta especie se trata de un fenómeno completamente natural, que también se presenta en los árboles en la naturaleza, por lo que no es necesario disimularlo.
A continuación el demostrador procedió a eliminar ramas secundarias, que daban un aspecto confuso al árbol, así como a cambiar la posición de algunas de las raíces aéreas, tras lo cual se eligió como rama trasera la que en ese momento era más débil y, por lo tanto fácil de manejar. En ese momento el Sr. Morales indico que en bonsái "en muchas ocasiones menos es más".
Después se procedió a cortar todas las ramas que mostraban un crecimiento vertical, tanto hacia arriba como hacia abajo, y se trabajó el nuevo ápice, que cuando el árbol vuelva a crecer deberá tener un follaje abundante.

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Ya se ve algo, ahora se puede trabajar

Una vez realizas estas operaciones Don Pedro comenzó el proceso de alambrado diciendo "el Ficus crece rápido, por lo que con esta especie se corre el riesgo de que el alambre termine marcándose. Para evitar esta circunstancia es necesario vigilar el crecimiento y desalambrar antes de que sea demasiado tarde".
Durante el alambrado el demostrador comentó que, en su opinión, era preferible utilizar un alambre un poco más grueso del que estrictamente sea necesario para cada rama. Además de alambrar, para bajar una de las ramas, también se utilizó un tensor.
Mientras realizaba el proceso de alambrado, D. Pedro comentó que la habilidad para alambrar correctamente sólo se logra con la práctica y realizó la siguiente pregunta "¿Qué árbol es el ideal para hacer practicas de alambrado cuando se es novato?". Alguien respondió "El pino". Otro dijo "El olmo", ....., finalmente el Sr. Morales se contestó a si mismo: "Ninguno de esos, ...... ¡cualquiera que no sea mío!".

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¿Quién dijo que los ficus no se almbran?

Para terminar con el alambrado, el demostrador comentó que lo más importante para que un alambrado sea efectivo es logran un buen anclaje.
Alquilen preguntó por el substrato ideal para cultivar un Ficus, y el Sr. Morales respondió que el Ficus es muy fácil de cultivar en cualquier tipo de tierra, pero probablemente una buena mezcla sea 1/3 de arena, 1/3 de tierra y 1/3 de turba.
Para terminar la demostración, D. Pedro Morales nos dijo que para conseguir que el tamaño de las hojas del Ficus sean pequeñas, se debe defoliar el árbol, y mantenerlo con poco agua y mucho sol.
Antes de que sonaran los aplausos de los asistentes, el Sr. Morales dio una receta para fabricar un insecticida casero: dos cucharadas de bicarbonato, dos cucharadas de jabón líquido y una cucharada de aceite (no necesariamente de oliva).

Foto nº 8
Resultado final. Ahora sol falta esperar.










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