Japón, el Paraíso de los Balnearios

02/01/2007

Imagen: 1


Imagen: 2


Imagen: 3


Imagen: 4


Imagen: 5


Imagen: 6


Imagen: 7


Imagen: 8


Imagen: 9


Imagen: 10

La mayoría de los japoneses son tan aficionados a las fuentes termales que están dispuestos a desplazarse a cualquier sitio, justo para pegarse un chapuzón, tanto en un lugar muy apartado de las montañas o en la propia localidad, donde puedan gozar de una atmósfera similar durante su tiempo libre. En estas páginas les introduciremos en los diferentes tipos de fuentes termales, cada una con su propio encanto, capaz de satisfacer a los amantes japoneses de los balnearios.

Texto: Torikai Shin’ichi
Fotos: Kono Toshihik
Colaboración fotográfica: Tokyo Dome Corporation

Foto nº 1
Balneario Tsuru-no-yu, Prefectura de Akita


Baño terapéutico en el valle de una tranquila montaña
Balneario Tsuru-no-yu, Prefectura de Akita


El Monte Nyuto se eleva 1.478 metros sobre el nivel del mar, en los límites de las prefecturas de Akita e Iwate, en el norte de Honshu. Las fuentes termales de Nyuto se esparcen alrededor de los pies de la montaña, con una apariencia muy similar a los balnearios antiguos.
El balneario más antiguo es Tsuru-no-yu. Su nombre significa: “La grulla de la fuente termal”, que procede de la leyenda sobre un cazador local, que hace mucho tiempo vió a una grulla tomando un baño en la fuente para curarse una herida. En esa fuente se construyó una cabaña y la gente ha acudido ahí desde entonces. El balneario es un lugar muy tranquilo en el interior de la montaña.
Según los datos que posee el albergue, en 1638 el señor feudal de Akita visitó la fuente, con la esperanza de que sus aguas remediaran sus males.
Era común que las familias campesinas de la localidad se reunieran allí tras la cosecha del otoño, permaneciendo durante unos diez días. Cocinaban sus comidas en el albergue y gozaban de sus aguas terapéuticas. El albergue comenzó a ofrecer comidas en 1953 y desde entonces los turistas se han acercado desde los más distintos lugares.
Recientemente, el albergue ha comenzado a recibir muchas visitas de gente de las grandes ciudades, atraídas por la arquitectura tradicional del balneario y su diseño. Algunos de los tejados son de cañizo y en cada cuarto hay un fogón hundido en el suelo, irori, en el centro, como en los viejos tiempos. Si usted se da un chapuzón en el estanque exterior y escucha el susurro de la brisa, a través del hayedo cercano, le desaparecerán sus preocupaciones, como si hubiera traspasado la barrera del tiempo.

Foto nº 2
Este balneario cuenta con cuatro diferentes tipos de estanques, cada uno especializado en un tipo de cura, entre las que se incluyen presión arterial alta, problemas oculares, heridas, etc. El precio por estancia de una noche con dos comidas es a partir de 9.000 yenes.


El balneario más sureño de Japón
Balneario Iriomote-jima, Prefectura de Okinawa


La Isla de Iriomote, a unos 450 km al sur de la Isla de Okinawa, está cubierta por una densa vegetación subtropical. Su vida salvaje es tan variada que a la isla se le conoce como: “la Galápagos del Este de Asia”. Bajo sus olas se extienden los arrecifes coralinos.
El Balneario de Iriomote, situado en la zona termal más sureña de Japón, fue inaugurado en 1998.
Su espléndida naturaleza ya era de por sí un atractivo para los turistas, pero a la hora de buscar ampliar su encanto decidieron desarrollar un balneario. Cuando éste fue inaugurado, los turistas podían bañarse y comer en sus instalaciones, pero no hubo servicio de hotel hasta julio de 2002. Se queden o no a pasar la noche, los clientes contarán con varias actividades lúdicas en sus alrededores, como introducirse en la espesa foresta o hacer submarinismo.
Quizás, una vez en el Balneario de Iriomote, a usted le apetezca tomar un baño en las instalaciones exteriores, gozando del estallido luminoso de los verdes vegetales del estanque golpeados por los potentes rayos del sol sub tropical. Allí, experimentará un tipo de vida idílica, típico de las islas del sur.

Foto nº 3
El estanque interior, en el jardín de este ryokan, recibe el nombre de Yama-neko-no-yu (“Estanque del Gato Montés”). Se necesita vestir traje de baño.

Foto nº 4
Vista del jardín interior, desde el estanque. El ryokan también cuenta con estanques interiores y exteriores con propiedades terapéuticas para dolores musculares, contusiones y otros dolores. Aquí en el Complejo Hotelero PainuMaya, el precio por noche, con dos comidas, es a partir de 14.500 yenes

Una fuente termal gigante en una encrucijada
Balneario de Atami, Prefectura de Shizuoka


Hace algunos años, si usted nombraba la palabra fuente termal, cualquiera hubiera pensado en primer lugar en Atami. Las parejas iban en masa durante su luna de miel, y posteriormente, durante la expansión económica en los sesenta, se hicieron populares los viajes de empresa y grupos turísticos. Muchísimos visitantes pasaban allí la noche, tomaban sus baños y hacían fiestas en los hoteles, que se amontonaban unos al lado de otros ofreciendo de 100 a 200 habitaciones y grandes salones para banquetes.
En la actualidad, la mayoría de los japoneses prefiere la libertad de viajar por su cuenta. Esto ha hecho que Atami tuviera que tomar sus decisiones.
Con la esperanza de hacer volver los buenos tiempos, Atami está experimentando con nuevos paquetes turísticos - tratamientos terapéuticos, ofrecidos por médicos locales, más el añadido de los baños y el alojamiento


Foto nº 5
Los hoteles se alinean en la costa de Atami, uno de los balnearios más cercanos a Tokio. Aquí son famosos los fuegos artificiales del verano.


Un nuevo balneario en el centro de la ciudad
Balneario Spa LaQua, Tokyo Dome City, Tokio


El balneario forma parte de un complejo recreativo que incluye el estadio cubierto Tokyo Dome, un parque de atracciones y un gran hotel. El complejo atrae la visita de 30 millones de personas cada año.
El Spa LaQua ofrece múltiples instalaciones - estanques exteriores diseñados como lugares termales rústicos en las montañas, saunas con forma de cabañas, zonas de descanso como si fueran complejos del Sudeste Asiático y más - y todo en el corazón de la ciudad. Los diseñadores han creado la ilusión de un mundo diferente.
Se dice que si usted perfora 1.000 metros en el suelo de Tokio, probablemente se topará con una fuente termal. Se han venido horadando pozos termales en muchas partes de la metrópoli, como en Odaiba, en las tierras ganadas al mar en la Bahía de Tokio. Sin embargo, en el balneario Spa LaQua fueron más lejos - llegaron a los 1.700 metros de profundidad - para conseguir una mejor calidad de agua. Se dice que sus aguas quedaron atrapadas en el subsuelo durante una glaciación hace más de 30.000 años.

Foto nº 6
Spa LaQua forma parte de un complejo que incluye un estadio cubierto de béisbol y un parque de atracciones.

Foto nº 7
La fuente mana desde el subsuelo de Tokio.

Foto nº 8
Estanque exterior para hombres. En las cercanías hay saunas y jacuzzis bien equipados. Las instalaciones sólo permanecen cerradas de 9 a 11 a.m.

Estas arenas gruesas y calientes le aliviarán el cansancio
Baño natural de arenas calientes, Prefectura de Kagoshima


Las aguas termales manan en muchos lugares de la costa de Ibusuki, Prefectura de Kagoshima. Por supuesto, usted puede elegir cualquiera para tomar un baño, pero Ibusuki es especialmente famosa por sus baños de arena. Durante más de 300 años los japoneses han venido aquí a enterrarse desde el cuello a los pies en esta arena, aprovechando la energía calorífica que surge de su suelo.
La arena se encuentra a unos 55 grados centígrados, demasiado caliente para poder resistirla si fuera agua, sin embargo aquí no tendrá ningún problema, ya que el aire se filtra entre los granos y actúa como un aislante.
Los agujeros se excavan a la medida de los cuerpos, con unos 10 cm de profundidad. Usted se tiende en el hueco y el personal que le atiende le cubrirá completamente, excepto, lógicamente, la cabeza. Al echarse notará el calor de la arena en su espalda y una vez cubierto sentirá la sensación de calor repartida por todo el cuerpo. Notará cómo le fluye la sangre por sus venas; el “baño de arena” favorece la circulación sanguínea.
Aunque al principio note muy caliente la arena, pronto observará que este calor se alivia extendiéndose por todo el cuerpo. Con 10 minutos de exposición es suficiente. Después, cuando usted se levanta y se sacude la arena, se encontrará cubierto en sudor, pero sintiéndose bien, con la sensación de ligereza al haberse quitado un peso de encima.

Foto nº 9
Se dice que un baño de arena es una buena solución terapéutica para la neuralgia, el reumatismo y el dolor de espalda, entre otros. El baño de arena y un chapuzón en el estanque le costará unos 1.000 yenes.










Volver




Club Bonsái Madrid - Real Jardín Botánico Plaza Murillo, 2 28014 Madrid - info@bonsaimadrid.org